Todos usamos diferentes máscaras por diferentes
razones.
Algunas máscaras nos las ponemos porque son lo que de verdad
queremos ser. Otras las llevamos porque no podemos enfrentarnos a lo que
realmente está debajo. O porque es lo que necesitamos para llegar a
ser ''alguien''. Creemos que bajo esa máscara estamos ocultos y seguros. Pero el problema de llevar máscara es que acaba pesando y puede caerse en cualquier momento.
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